Donde su familia le apoyaba y animaba, otras  mujeres en las cercanías de donde vive tienen pocas oportunidades y a menudo crecen en circunstancias difíciles. Imani ha aprovechado el poder del surf para empoderar a estas mujeres y ayudarlas a mejorar sus vidas.

Tiene una hija de 3 años que es una gran motivación en esta misión. Imani dirige campamentos de entrenamiento regulares para enseñar  a las mujeres  el arte  de coger olas. Esto desarrolla la auto-motivación, el sentido de comunidad y el respeto por el medio ambiente. El surf proporciona un escape de las calles y un camino alternativo de una vida rodeada de violencia y crimen, abriendo ventanas a oportunidades económicas.

“EL SURF PROPORCIONA UN ESCAPE DE LAS CALLES Y UN CAMINO ALTERNATIVO A UNA VIDA RODEADA DE VIOLENCIA Y CRIMEN”

El impacto de Imani sobre las mujeres de su entorno lo puede explicar  Melissa, quien está aprendiendo a ser  entrenadora de surf. La vida de Melissa cambió totalmente después de conocer a Imani y aprender a surfear. Después de ser liberada de la prisión, con pocas esperanzas de reconstruir su vida y encontrar un trabajo adecuado, ahora posee su propio negocio exitoso y su historia resume los resultados positivos del trabajo de Imani.

La película captura  la primera competición de surf femenina en Jamaica. Imani es un modelo a seguir, trabajando con la organización internacional Black Girls Surf, para inspirar a las mujeres de todo el mundo a que vean un lugar en la industria global del surf. Su objetivo es inspirar a la próxima generación de surfistas afrocaribeñas y continuar como la fuerza motriz de este movimiento vital.

Vídeo Real Stories (@realstoriesdocs)